Ricardo Lowenberg, Nacido en México D.F., pero Tampiqueño por adopción, uno de los noveles representantes de la pintura contemporánea mexicana, y uno de los principales de la floreciente escuela pictórica del país. Fuertemente influenciado por el impresionismo europeo y los grandes muralistas mexicanos.
El signo de Ricardo Lowenberg es sin duda la exploración de la forma y el color, pues a su interés inicial en la música y diseño de interiores ha sumado su entrega a las artes plásticas. El resultado es una pintura donde los ritmos se traducen en formas y los espacios en colores, intenciones resueltas con armonía y dinamismo. Sus pinceladas parecieran casuales pero están perfectamente aplomadas, colores de fantasía y texturas fabulosas. Su pintura tiene alma basta ver en su obra la expresión de los ojos, o tal vez sea el alma de las cosas y la gente lo que Ricardo quiere mostrar.
Orgulloso de la tierra que lo vio crecer como artista, donde ha sido parte del festival Cultural Internacional Tamaulipas, por muchos años, Lowenberg ha expuesto desde 1995, en exhibiciones individuales y colectivas en México, Europa y Estados Unidos. Destacando su Muestra Individual en 2005, en el prestigiado “Centro Cultural Poliforum Síqueiros” en la ciudad de México, donde su éxito habló de su calidad y talento como artista, inaugurando su exhibición el maestro José Luis Cuevas.
En septiembre de 2007 presento su exhibición Individual en el “Hotel Hemitage” del Principado de Mónaco.
En septiembre de 2008 presento su exposición en la exclusiva “Galería Agora” de Nueva York.
Ricardo Lowenberg’ native of mexico city, he has lived in tampico on the coast of the gulf of mexico since 1983. Ricardo´s paintings are a personal, contemplative look into a captivating world of human drama and cryptic symbolism. Influenced by the Impressionists as well as the great Mexican muralists, he creates fascinating allegories and beautiful portraiture that are interspersed with lovely flora and idyllic landscapes. His brushwork is precise without appearing calculated and his palette is bright and tropical, full of emoción with the spirit that merge to create a remarcable artwork. The moods that Lowenberg conveys range from contemplative to joyous, the power of his characters lies in their statuesque features and potent eyes. Lowenberg’s sensitive renderings are cloaked in psychological drama that bestows the same prominence to banal daily activities and crucial life events. In the simple, everyday human activity there appears contemplation and ritual knowingly playing their part amongst the rhythms of nature. Meanwhile, Lowenberg’s landscapes and still-lifes are incredibly lush where cool blues and deep violets match the brilliant hues of citrus and verdant greens.
Ricardo Lowenberg’s work has been collected and exhibited throughout the United States, Mexico, and Europe.